La curva de distribución de energía espectral es aquella que muestra la relación existente entre la energía emitida (eje de ordenadas) y la longitud de onda de la radicación (eje de abscisas).
Cada fuente de luz emite una radiación electromagnética distinta. Cada una tiene una curva de distribución espectral diferente que les otorga propiedades diferentes, con sus ventajas e inconvenientes. Por ejemplo, la curva de distribución espectral del sol tiene un espectro continuo mientras que las fuentes de luz de sodio no.